Avanzamos metidos en lo nuestro tu secreto que es mío
mi secreto que es tuyo
sin problemas las pasiones se unen
con fuerza interior
todo lo compartimos en el sueño
oscuro con oscuro
cuerpo a cuerpo
a veces son ternuras del espíritu
abrazos con candado
si enfrentamos de apuro al espejo
la sorpresa lo empaña
sus ojos son los nuestros
quién lo duda
mejor dicho una copia clandestina
por eso es tan ajena la mirada
no queremos abandonar lo propio
así que no nos vengan con destellos extraños
avancemos metidos en lo nuestro
tu secreto que es mío
mi secreto que es tuyo
miércoles, 30 de octubre de 2013
martes, 29 de octubre de 2013
La aventura de Ítaca, por Roberto Giménez
En este mismo Editorial la pasada semana
(mayo 2012) señalábamos seis principios de Joseph
Goebbels, ministro de propaganda nazi, aplicándolos a la crisis actual en
que se nos quiere hacer ver que la culpa no es de nadie en particular, sino de
todos en general, por haber gastado más de lo que deberíamos. Es una hábil técnica
propagandista que busca primero la aceptación de la culpa y en consecuencia la
resignación. Estas técnicas de propaganda son enormemente eficaces. En el
decálogo de Goebbels, en realidad son once principios, hay un séptimo que
también es utilizado por los demagogos en estos días de pesares y de temores, a
saber:
Es el Principio
de la exageración
y desfiguración. Y se trata de convertir cualquier
anécdota, por pequeña que sea, en una amenaza grave para la comunidad
nacional. Exagerar la amenaza para que la piña esté más compacta.
Y la película que los goebbelianos de
nuestros días están fabricando es que a partir de la aprobación de la ley de
estabilidad presupuestaria el Estado va a intervenir las autonomías que no
hagan los ajustes que se necesitan. El mensaje es que esta ley de estabilidad
se ha redactado contra nosotros, ya que Catalunya (y también Andalucía) es la china en el zapato de la uniformidad que
pretende el PP. A modo de ejercicio de distracción, primeramente intervendrá
una autonomía menor en manos del PP a modo de ejemplo y argumento preventivo
para, posteriormente, ir a cazar la pieza mayor realmente buscada. No se
atreverán con el País Vasco, porque allí está ETA en la reserva activa, pero sí
con la pacífica Catalunya. Y como ya ha anunciado Francesc Homs, portavoz del Govern, esta vez no vendrán con tanques sino con interventores…
Los
propagadores de esta trama digna de una patología en fase
aguda de la paranoia, los Salvador Cardús
i Cía, dan un paso más allá y ya desean que el propio Estado español sea
intervenido por Bruselas bajo el principio de que contra peor le vaya a España, mejor le irá a Catalunya, porque una
intervención de Europa a España provocará una intervención general de la
Administración Central del Estado sobre las comunidades y esto pondría patas
arriba el Estado de las Autonomías y el mismo sistema constitucional, y que
toda esta arquitectura política podría convertirse en una especie de Titanic
naufragando en la tempestad en un mar desconocido e impredecible… Y de esta
forma Catalunya, con un bote salvavidas de remeros liberados de la esclavitud,
pudiera salvarse navegando audazmente, contra viento y marea, hacia la mítica
Ítaca.
Quienes defienden esta aventura hacia lo
desconocido un consejo: lean la Odisea de Ulises en su viaje de retorno a la
isla patria. Léanla y sabrán que en la epopeya clásica de Homero, Ulises llegó
a la Itaca deseada, y pudo volver a abrazar a su amada Penélope, pero el
naufrago llegó solo a la isla. Único superviviente. La tripulación entera murió
en una trágica aventura que les llevó al fondo del mar en un viaje hacia el
infierno.
Las
técnicas propagandistas de Goebbels son tan devastadoras
hoy como hace setenta y cinco años, y la aventura de Homero en busca de la
mítica Itaca, también.
Autor: Roberto Giménez, Revista del Vallès. Cataluña, España. Mayo 2012
@rgimenezgracia
Quiero agradecerle a Roberto Giménez la
gentileza de cederme el artículo para publicarle en este blog.
sábado, 26 de octubre de 2013
La víctima podrías ser tú
Quizás los hechos que nos suceden en los últimos días nos abruman, nos emocionan, nos llenan de ira, rabia, llanto, impotencia. Lo digo desde una posición extraña, pues lo que ocurre pudiera ser ajeno a mí. Más sin embargo, cuando hay pérdida, dolor, ese vacío que queda en familias truncadas por la violencia, sin explicación alguna, se siente un nexo, un lazo que pudieras no entenderse, pero existe.
Tal vez no puedo ser ajena porque mi país natal, Venezuela ha tenido un convenio con España, el cual fue firmado bajo la presidencia de Carlos Andrés Pérez y Felipe González respectivamente, quienes a su vez fueron grandes amigos, pues éste último se formó políticamente en gran medida bajo la protección y tutoría del primero. Bajo este convenio una serie de Etarras fueron llevados a Venezuela empleando un término que nos resultó extraño para los venezolanos, llegaron en calidad de “deportados”, y actualmente poseen la doble nacionalidad. A su vez, mucho se ha “especulado” sobre la relación entre la FARC y ETA, con el régimen de Hugo Chávez y también el actual. Es por ello que el tema no me es extraño, me llega de cerca.
Venezuela está viviendo una ola de violencia que arroja la cifra espantosa de más de 10 mil muertes al año por esta causa. Actualmente el desabastecimiento, luego de acabar con el sistema productivo y la seguridad alimentaria del país, es lo que prima.
En este momento siento que mis realidades se mezclan, se unen de alguna manera. Estrasburgo, el Tribunal de los DDHH, la violación de estos derechos para con las víctimas de ETA, favorecer a los victimarios quizás sea el punto de inflexión, esto que desgraciadamente nos une.
Siempre tengo a mano la Declaración Universal de Derechos Humanos firmada el 10 de diciembre de 1948. Creo que hoy es más pertinente que nunca. Vale la pena releerle. La declaración, previamente a mencionar cada uno de los 30 artículos, tiene una serie de considerandos, el primero, llama la atención por su contenido “Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana”, además de ello, el artículo 3 menciona literalmente la “Todo individuo tiene derecho a la seguridad de su persona”. Entonces viene la pregunta, ¿cómo podrá el gobierno como garante de estos derechos responder ante la seguridad de los habitantes de España?
La sociedad no puede ni debe dejarse dividir entre quienes están o no a favor de las víctimas, quienes han muerto de forma violenta y sus seres queridos que viven el día a día sin su presencia. No podemos permitir que nos dividan entre buenos y malos porque no lo somos, formamos parte de una sociedad con deberes y derechos. Cualquiera de nosotros puede estar en los zapatos de las víctimas en algún momento de su vida, ahora me pregunto, ¿estamos dispuestos a ello?
Me permito dejarles el link a la página de la ONU donde pueden
releer los DDHH, cada uno de sus 30 artículos y las consideraciones previas.
http://www.un.org/es/documents/udhr/
miércoles, 23 de octubre de 2013
Qué difícil es hablar el español, Juan Andrés y Nicolás Ospina
"Dedicado a todos en América y España, a toda la comunidad hispanoparlante, la diversidad cultural, la riqueza del lenguaje y las personas que intentaron hablar español alguna vez y no lo lograron." Juan Andrés y Nicolás Ospina
Un par de hermanos, excelentes músicos colombianos, nos deleitan con esta canción que nos muestra en pocos minutos con unas cuantas palabras y de forma simpática y particular, la enorme riqueza de nuestro idioma.
Vale la pena escucharles, un vídeo de poco mas de 8 minutos que nos arrancan espontáneas sonrisas y hasta carcajadas dejando volar nuestra imaginación y viajando con ellos a los diferentes países que hablamos esta lengua que nos une.
martes, 22 de octubre de 2013
Hoy, Estrasburgo y la Doctrina Parot ... ¿mañana qué?
Tal vez este eterno optimismo por defecto me hace esperar lo
mejor de cada persona, indistintamente quien sea o donde esté. Quizás eso me ha
ocurrido el día de hoy. Por momentos me sentía extremadamente europea, adoptiva
y adaptada, pero europea, en un continente donde la Justicia debería imperar,
donde desde diferentes puntos del planeta recurrimos al famoso Tribunal de la
Haya por esos crímenes de “lesa humanidad”, y hoy atentamente, llenos de expectativas
y sin perder las esperanzas esperábamos la sentencia del Tribunal de
Estrasburgo, la Doctrina Parot en el estrado.
Quizás me invadía un presentimiento que no quería aceptar,
tal vez un presentimiento compartido por quienes estamos del lado de las
víctimas, y es que ahora existen dos mitades, nos siguen dividiendo, o intentan
hacerlo. Sabíamos que todo estaba dicho, todo estaba hecho, previamente,
premeditadamente.
Si, Estrasburgo y su tribunal decidían a las 11h a favor de
los asesinos y sus derechos humanos. Por momentos me sentí trasladada de sitio,
de lugar, de continente, de país. Vivir por un segundo como la llamada “justicia”
emite un fallo en favor de los victimarios, no de las víctimas, dejándoles a estas
últimas desamparadas, en medio de la impunidad. Este déjà vu terrible me ha
invadido todo el día, y aun hasta estas horas siento como se hermanan víctimas
a ambos lados del continente, con tribunales que ignoran los derechos humanos
de quienes han sido agredidos, de las torturados, asesinados, violados, los
derechos humanos de las familias que aún sufren pérdidas irreparables, pero que
la justicia debería amparar, mitigar en algo el dolor indescriptible de la
ausencia.
Pero no, todo no está dicho, todo no está hecho. Sé, y es
una convicción, que la Asociación Víctimas del Terrorismo recurrirá a todo lo
posible dentro de la ley para que esta terrible sentencia sea revertida, que la
sociedad civil, nosotros como una ciudadanía activa les debemos apoyar en todo
momento. Estoy consciente como muchos que la sentencia no es vinculante, que España tiene la última palabra, que se ha de recordar que la seguridad de los suyos, de quienes
vivimos en esta hermosa y digna tierra es mucho más importante que cualquier
otro hecho, incluyendo el de hoy, en Estrasburgo.
Distancia o cercanía, Vicente Gerbasi
No sé si estamos cerca
o si una distancia eterna
nos separa.
Nuestro diálogo no se muere
y en su espacio
brillan muy cerca de nuestras manos
las estrellas de Jerusalén.
Hay un silencio para cada olivo.
En Florencia
comprabas un traje
bordado con flores de almendro.
Pero la casa
era nuestro principio
y nuestro fin.
Ahora está sola.
No se si estamos cerca
o si una distancia eterna
nos separa
o si una distancia eterna
nos separa.
Nuestro diálogo no se muere
y en su espacio
brillan muy cerca de nuestras manos
las estrellas de Jerusalén.
Hay un silencio para cada olivo.
En Florencia
comprabas un traje
bordado con flores de almendro.
Pero la casa
era nuestro principio
y nuestro fin.
Ahora está sola.
No se si estamos cerca
o si una distancia eterna
nos separa
lunes, 21 de octubre de 2013
Como árboles, Mario Benedetti
que estos poemas de otros
iban a ser míos
después de todo hay hombres que no fui
y sin embargo quise ser
sino por una vida
al menos por un rato
o por un parpadeo
en cambio hay hombres que fui
y ya no soy ni puedo ser
y esto no siempre es un avance
a veces es una tristeza
hay deseos profundos y nonatos
que prolongué como coordenadas
hay fantasías que me prometí
y desgraciadamente no he cumplido
y otras que me cumplí sin prometérmelas
hay rostros de verdad
que alumbraron mis fábulas
rostros que no vi más pero siguieron
vigilándome desde
la letra en que los puse
hay fantasmas de carne
otros de hueso
también los hay de lumbre y corazón
o sea cuerpos en pena almas en júbilo
que vi o toqué o simplemente puse
a secar
a vivir
a gozar
a morirse
pero además está lo que advertí de lejos
yo también escuché una paloma
que era de otros diluvios
yo también destrocé un paraíso
que era de otras infancias
yo también gemí un sueño
que era de otros amores
así pues
desde este misterioso confín de la existencia
los otros me ampararon como árboles
con nidos o sin nidos
poco importa
no me dieron envidia sino frutos
esos otros están
aquí
sus poemas
son mentiras de a puño
son verdades piadosas
están aquí
rodeándome
juzgándome
con las pobres palabras que les di
hombres que miran tierra y cielo
y a través de la niebla
o sin sus anteojos
también a mí me miran
con la pobre mirada que les di
son otros que están fuera de mi reino
claro
pero además
estoy en ellos
a veces tienen lo que nunca tuve
a veces aman lo que quise amar
a veces odian lo que estoy odiando
de pronto me parecen lejanos
tan remotos
que me dan vértigo y melancolía
y los veo minados por un duelo sin llanto
y otras veces en cambio
los presiento tan cerca
que miro por sus ojos
y toco por sus manos
y cuando odian me agrego a su rencor
y cuando aman me arrimo a su alegría
quién hubiera dicho
que estos poemas míos
iban a ser
de otros.
domingo, 20 de octubre de 2013
"AHORA ESTOY SOLO", Laureano Marquez
AHORA ME LLEVAN A MI.
Primero dijo: "No atiendas a lo que digo sino a lo que hago", y yo me lo creí, porque siempre pensé que los políticos son sólo unos habladores de pistoladas, y no representaban mayor peligro; ellos a lo suyo y yo a lo mío.
Un día sacaron a Sofía Ímber del Museo de Arte Contemporáneo, pero como a mí los museos me ladillan, no me importó. Después botaron a 18 mil trabajadores de PDVSA, pero me dije: "Es que también la vaina en PDVSA era insostenible" , y me callé.
Luego vino la matanza en la Plaza Altamira, pero como yo nunca estuve por allí, lo dejé de ese tamaño. Cuando vi que Vargas no se recuperaría jamás, decidí no preocuparme y vacacionar en Margarita, porque, al fin y al cabo, yo no tenía familia en Vargas. Se llevaron presos a varios militares disidentes, otros huyeron del país; pero, francamente, a mí nunca me gustaron los militares.. Comenzaron a acorralar a los periodistas. Pero bueno, ése es el oficio que ellos escogieron y tiene sus riesgos..
Cada vez que golpeaban a los que salían a marchar, como el día que una señora perdió un ojo, me dije: "Ya los tiempos de marchar pasaron, ¿qué hace una señora de esa edad metiéndose en vainas?". Hicieron preso a Carlos Ortega, pero como él es adeco y yo siempre les he tenido arrechera, no me preocupé; ellos son muy culpables de lo que está pasando.
Asesinaron a una señora en Altamira el día del Referendo Revocatorio, ¡qué mala suerte tuvo!Cuando oí lo de la Reforma de la Educación, pensé que, en última instancia, puedo mandar a los niños a estudiar a los Estados Unidos, porque un poco de inglés no les viene mal.
Persiguieron con la "Lista Tascón", a los empleados públicos que firmaron para solicitar el Referendo Revocatorio, pero, gracias a Dios, yo no trabajo para el gobierno.
Luego vino lo de Polar y Hacienda Santa Teresa, pero ésa es gente de plata; ellos sabrán cómo defenderse.
De los presos del Táchira no dije nada, aunque sabía que era una injusticia, porque, en todo lo que tiene que ver con el 11 de Abril del 2002, es mejor no meterse.
Masacraron a unos estudiantes en el barrio "Kennedy" y no protesté porque eran pobres; entre los pobres siempre pasan esas cosas.
Después vino lo de la toma de la hacienda La Marqueseña, pero en ese momento yo tenía unos negocios buenísimos con el gobierno; mi corazón es escuálido, pero mi bolsillo es chavista y hay que tratar de sacarles algo de dinero.
Abrieron procedimientos en contra de algunos canales, pero yo no soy dueño de medios y en ese momento andaba en otra cosa..
Ahora me llevan a mí, pero ya es demasiado tarde. Ahora estoy solo.
Laureano Márquez,
Primero dijo: "No atiendas a lo que digo sino a lo que hago", y yo me lo creí, porque siempre pensé que los políticos son sólo unos habladores de pistoladas, y no representaban mayor peligro; ellos a lo suyo y yo a lo mío.
Un día sacaron a Sofía Ímber del Museo de Arte Contemporáneo, pero como a mí los museos me ladillan, no me importó. Después botaron a 18 mil trabajadores de PDVSA, pero me dije: "Es que también la vaina en PDVSA era insostenible" , y me callé.
Luego vino la matanza en la Plaza Altamira, pero como yo nunca estuve por allí, lo dejé de ese tamaño. Cuando vi que Vargas no se recuperaría jamás, decidí no preocuparme y vacacionar en Margarita, porque, al fin y al cabo, yo no tenía familia en Vargas. Se llevaron presos a varios militares disidentes, otros huyeron del país; pero, francamente, a mí nunca me gustaron los militares.. Comenzaron a acorralar a los periodistas. Pero bueno, ése es el oficio que ellos escogieron y tiene sus riesgos..
Cada vez que golpeaban a los que salían a marchar, como el día que una señora perdió un ojo, me dije: "Ya los tiempos de marchar pasaron, ¿qué hace una señora de esa edad metiéndose en vainas?". Hicieron preso a Carlos Ortega, pero como él es adeco y yo siempre les he tenido arrechera, no me preocupé; ellos son muy culpables de lo que está pasando.
Asesinaron a una señora en Altamira el día del Referendo Revocatorio, ¡qué mala suerte tuvo!Cuando oí lo de la Reforma de la Educación, pensé que, en última instancia, puedo mandar a los niños a estudiar a los Estados Unidos, porque un poco de inglés no les viene mal.
Persiguieron con la "Lista Tascón", a los empleados públicos que firmaron para solicitar el Referendo Revocatorio, pero, gracias a Dios, yo no trabajo para el gobierno.
Luego vino lo de Polar y Hacienda Santa Teresa, pero ésa es gente de plata; ellos sabrán cómo defenderse.
De los presos del Táchira no dije nada, aunque sabía que era una injusticia, porque, en todo lo que tiene que ver con el 11 de Abril del 2002, es mejor no meterse.
Masacraron a unos estudiantes en el barrio "Kennedy" y no protesté porque eran pobres; entre los pobres siempre pasan esas cosas.
Después vino lo de la toma de la hacienda La Marqueseña, pero en ese momento yo tenía unos negocios buenísimos con el gobierno; mi corazón es escuálido, pero mi bolsillo es chavista y hay que tratar de sacarles algo de dinero.
Abrieron procedimientos en contra de algunos canales, pero yo no soy dueño de medios y en ese momento andaba en otra cosa..
Ahora me llevan a mí, pero ya es demasiado tarde. Ahora estoy solo.
Laureano Márquez,
15 de febrero de 2010 a la(s) 20:50
Venezuela, te quiero de vuelta
Recuerdo perfectamente todas las clases de historia que me dieron mis profesores y maestros, y las mejores, LAS DE MI PADRE, donde nunca se mencionó que el pensamiento de Bolívar estuviera acorde con algo semejante a lo que está ocurriendo en Venezuela y en America Latina en general...
Y es que no creo en un sistema donde se hace lo que una sola persona piensa y dice, donde un hombre por caprichos megalomaníacos ha decidido cambiar nuestro país y nuestra historia.
No creo en un régimen que siembra miseria, divisiones y odios, que irrespeta al que piense distinto, veta y encarcela al que lo dice y arremete al que actúa diferente. No creo en un sistema donde la magnitud de la corrupción es hoy sólo superada por la impunidad con la que operan los corruptos de su régimen.
No creo en quien gracias al petróleo se pueden dar el lujo de ocultar que han devastado nuestra economía a pasos agigantados, que juega con una inflación de las más altas del mundo para sembrar su régimen de pobreza.
No creo en un régimen que menosprecia a sus ciudadanos, a sus universidades y prefiere llevar a los puestos de trabajo a extranjeros con la firme intención de controlar a todos y a todo.
No creo en un régimen que se alimenta de la injusticia, se ampara en la impunidad, se crece con la inseguridad, paga por alterar el orden público, financia la anarquía.
No quiero tener que avergonzarme día a día de lo que hace y dice el gobernante de mi país, donde la barbarie ha suplantado el pensamiento instruido, los resentidos y delincuentes se han arrimado a un régimen militar y han sacado gruesas tajadas de la rebatiña de un país, y ya buchones, no paran de comprar conciencias de aquellos que les interesa que este régimen siga.
No quiero tener que avergonzarme continuamente de un gobernante que ha entregado un país a los regímenes más sanguinarios y dictatoriales, como el castro-comunista y el iraní, y que ha traicionado su patria por sus ansias de poder absolutista.
Quiero de vuelta el país de contrastes y de mestizos, ese país de 3000km de costas caribeñas, de montañas con nieves eternas, de llanuras infinitas, de sabanas con tepuyes y selvas de verdes embriagadores.
Quiero mi país con su gente, de acento dulce, de vida alegre, mente y corazón abierto, donde el que llega se adopta como propio.
Quiero un país donde el petróleo no se use como arma para comprar almas y pueblos, donde nuestros bienes no sean usados como la hacienda particular del gobernante de turno.
Quiero a mi país, que respetó siempre a la soberanía de los pueblos, y era una consigna desde Miranda, Bello, Rodríguez, Páez, Bolívar.
Venezuela, ¿que te hemos hecho?... ¿dónde estas?? ¡Te quiero de vuelta!
Y es que no creo en un sistema donde se hace lo que una sola persona piensa y dice, donde un hombre por caprichos megalomaníacos ha decidido cambiar nuestro país y nuestra historia.
No creo en un régimen que siembra miseria, divisiones y odios, que irrespeta al que piense distinto, veta y encarcela al que lo dice y arremete al que actúa diferente. No creo en un sistema donde la magnitud de la corrupción es hoy sólo superada por la impunidad con la que operan los corruptos de su régimen.
No creo en quien gracias al petróleo se pueden dar el lujo de ocultar que han devastado nuestra economía a pasos agigantados, que juega con una inflación de las más altas del mundo para sembrar su régimen de pobreza.
No creo en un régimen que menosprecia a sus ciudadanos, a sus universidades y prefiere llevar a los puestos de trabajo a extranjeros con la firme intención de controlar a todos y a todo.
No creo en un régimen que se alimenta de la injusticia, se ampara en la impunidad, se crece con la inseguridad, paga por alterar el orden público, financia la anarquía.
No quiero tener que avergonzarme día a día de lo que hace y dice el gobernante de mi país, donde la barbarie ha suplantado el pensamiento instruido, los resentidos y delincuentes se han arrimado a un régimen militar y han sacado gruesas tajadas de la rebatiña de un país, y ya buchones, no paran de comprar conciencias de aquellos que les interesa que este régimen siga.
No quiero tener que avergonzarme continuamente de un gobernante que ha entregado un país a los regímenes más sanguinarios y dictatoriales, como el castro-comunista y el iraní, y que ha traicionado su patria por sus ansias de poder absolutista.
Quiero de vuelta el país de contrastes y de mestizos, ese país de 3000km de costas caribeñas, de montañas con nieves eternas, de llanuras infinitas, de sabanas con tepuyes y selvas de verdes embriagadores.
Quiero mi país con su gente, de acento dulce, de vida alegre, mente y corazón abierto, donde el que llega se adopta como propio.
Quiero un país donde el petróleo no se use como arma para comprar almas y pueblos, donde nuestros bienes no sean usados como la hacienda particular del gobernante de turno.
Quiero a mi país, que respetó siempre a la soberanía de los pueblos, y era una consigna desde Miranda, Bello, Rodríguez, Páez, Bolívar.
Venezuela, ¿que te hemos hecho?... ¿dónde estas?? ¡Te quiero de vuelta!
sábado, 19 de octubre de 2013
La sangre de mi espíritu, Miguel de Unamuno
La sangre de mi espíritu
Miguel de Unamuno
La sangre de mi espíritu es mi lengua,
y mi patria es allí donde resuene
soberano su verbo, que no amengua
su voz por mucho que ambos mundos llene.
Ya Séneca la preludió aún no nacida
y en su austero latín ella se encierra;
Alfonso a Europa dio con ella vida.
Colón con ella redobló la Tierra.
Y esta mi lengua flota como el arca
de cien pueblos contrarios y distantes,
que las flores en ella hallaron brote,
de Juárez y Rizal, pues ella abarca
legión de razas, lengua en que a Cervantes
Dios le dio el Evangelio del Quijote.
Miguel de Unamuno
La sangre de mi espíritu es mi lengua,
y mi patria es allí donde resuene
soberano su verbo, que no amengua
su voz por mucho que ambos mundos llene.
Ya Séneca la preludió aún no nacida
y en su austero latín ella se encierra;
Alfonso a Europa dio con ella vida.
Colón con ella redobló la Tierra.
Y esta mi lengua flota como el arca
de cien pueblos contrarios y distantes,
que las flores en ella hallaron brote,
de Juárez y Rizal, pues ella abarca
legión de razas, lengua en que a Cervantes
Dios le dio el Evangelio del Quijote.
viernes, 18 de octubre de 2013
VALEROSA AMAZONA
VALEROSA AMAZONA
Campaña contra el Cáncer de mama... Tócate
Pentesilea:
Campaña contra el Cáncer de mama... Tócate
Ya eres parte de la historia y aún no lo sabes madre.
“Cuenta la leyenda que las amazonas sacrificaban su pecho derecho para poder pelear mejor lanzando mortales flechas y manejando la lanza en la batalla…”
Pentesilea:
Campaña contra el Cáncer de mama... Tócate! |
Avanzas valiente
sobre el caballo de la vida
mostrando orgullosa
cicatrices guerreras:
desangradas venas,
fracturada mano,
corazón desgarrado,
pecho mutilado,
sacrificada melena.
Valerosa amazona
te bates cada amanecer
en dura guerra sin cuartel,
destruyendo a golpetazos
pesadillas, ansiedades,
presagios funestos
y malos augurios.
Firme caminas
hacia tu próxima batalla,
la victoria definitiva.
Tú ya no eres mía.
Ya no me perteneces.
Has regresado al lugar del que partiste
para enseñarme a aprender,
para superarte en sabiduría, en amor,
en sacrificio, en dolor…
en vida de tu herida.
Madre, ya eres una heroína del destino
coronada por la fuerza del laurel victorioso
de los dioses del Olimpo.
Mar Marchante Ortega
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